Reflexiones sobre la formación, como elemento dinamizador en la empresa
Cada vez estoy más convencido de que la formación dentro de la empresa es fundamental para la correcta evolución, crecimiento y desarrollo de la misma.
Las personas que integramos una organización debemos explotar al máximo nuestras habilidades y conocimientos y además ponerlos a disposición de la compañía, compartiéndolos en lo posible.
Pero las empresas son, en general, entidades con estructuras muy rígidas en cuanto a su organización de trabajo, y no se adaptan con la suficiente rapidez a los cambios tecnológicos. Los mercados, cada vez más globales, nos exigen innovar constantemente – re-inventarnos -, debido a la fuerte competitividad existente.
La formación es la única variable dentro de la empresa, que con la información nos proporciona conocimiento, y este favorece la innovación. Aceptar recibir formación es tanto como estar dispuesto a cambiar, a reconocer que las cosas se pueden hacer de otra manera. Formar a los profesionales en las nuevas tecnologías, en nuevas formas de organización, en el control de los procesos de la gestión, educarles en el concepto de excelencia empresarial, facilitará la actitud ante los cambios, capacitándolos para el uso de estas nuevas herramientas.
Sólo las empresas que cuenten con este tipo de profesionales, y con este estilo directivo, serán capaces de innovar y ser competitivas, y por ello avanzar.
Consideremos pues el coste de la formación y de las nuevas tecnologías no con un gasto sino como una inversión.
José María Marco L.
Eso es lo mejor que aprendí de mi padre, que siempre nos decía que la mejor herencia que podía dejarnos era una buena formación.
Y efectivamente, como bien dices, las empresas deben ser conscientes de lo importante que es invertir en el capital humano, sobre todo en tiempos de crísis, donde se tiende a reducir los gastos, siendo uno de los más afectados la formación, como me imagino que ya habréis notado. Y eso es un gran error, pues dependiendo deltipo de actividad puede perjudicar mucho la calidad del servicio prestado e incluso la imagen. Un saludo.
Me alegro de que pienses igual. La mejor herencia, sin duda, y diría que el mayor tesoro que puede acumular una persona.